Hoy hace un año que inicié un proceso de reflexión interna. Quería seguir creciendo personal y profesionalmente y decidí que la mejor alternativa era cursar el Máster en Comunicación Empresarial, una formación adecuada al entorno social y empresarial actual.
Poseía una licenciatura técnica y un postgrado en una prestigiosa escuela de negocios, así como experiencia significativa dirigiendo equipos y proyectos en sectores diversos. Estaba convencido de que el máster me ayudaría, entre otras cosas, a completar mi perfil mejorando mi capacidad de comunicación y dotándome de instrumentos para tener éxito en los procesos internos y externos que afectaban a mi actividad profesional.
En el día a día empresarial siempre está presente la comunicación, convirtiéndose en un pivote claro sobre el que articular el éxito o el fracaso de cualquier proyecto. Es fácil pensar en la comunicación como la herramienta para poner en marcha un plan de marketing, por ejemplo lanzando una campaña de medios. Pero está igualmente presente cuando debemos transmitir un plan estratégico a todos los colaboradores de la organización o planificar y ejecutar un evento. Indudablemente, es la comunicación la herramienta imprescindible cuando definimos e implementamos el plan de crisis en nuestra organización.
En una actividad tan recurrente como una negociación, donde el directivo representa a su entidad, entender la comunicación no verbal o cumplir adecuadamente el protocolo puede tener un valor fundamental. Establecer unas relaciones públicas adecuadas, desarrollar una oratoria impecable o elaborar presentaciones eficaces será clave a la hora de conseguir el mejor resultado posible para nuestra empresa.
En el día a día, se incrementará la productividad personal y colectiva si disponemos de las herramientas para conseguir que las reuniones y comités se conviertan en algo dinámico y eficiente.
Pensemos en las publicaciones de empresa, una herramienta que hoy es habitual para mejorar la cohesión y la comunicación interna. Entender lo que queremos comunicar, cómo vamos a hacerlo y los factores de éxito de una publicación de este tipo, será clave para alcanzar sus objetivos.
Por otra parte, nadie imagina hoy una compañía enfocada hacia el público general sin presencia en las redes sociales. Mi empresa, ¿debe estar presente en Twitter, Facebook o Linkedin? ¿Qué estrategia debo seguir? ¿Por qué mi web no aparece la primera en las búsquedas de Google?
Es posible que queramos conocer mejor a nuestro cliente y lanzar una investigación de mercado y, tras entender más sobre nuestro público objetivo, lanzar una campaña publicitaria. Seguro que incrementará la productividad de nuestros comerciales establecer una serie de mensajes homogéneos que faciliten a su labor. Nuevamente, la comunicación como herramienta clave.
O quizá querremos iniciar una serie de proyectos de responsabilidad social corporativa para mostrar como nuestra empresa no tan sólo se preocupa de recoger beneficio de la sociedad sino que devuelve una parte, más allá de las obligaciones legales, en forma de acciones solidarias. ¿Comunico o no comunico mi RSC? ¿Cómo lo hago para no se malinterprete?
He dejado para el final lo que seguramente es lo primero con lo que se relaciona a un máster de esta tipología: la relación con los medios de comunicación. ¿Conocemos cómo establecer una relación de confianza, sostenible, con los periodistas? ¿Sabemos cómo posicionar a nuestra compañía ante los medios? ¿Entendemos qué es un gabinete de comunicación y cómo funciona? ¿Nos preguntamos por qué nadie lee ni publica mis notas de prensa?
Son grandes preguntas a las que todo directivo debería encontrar respuesta y el Máster en Comunicación Empresarial es el lugar adecuado para hallarlas. Durante este año hemos podido aprender en todos esos campos, para ser mejores profesionales en nuestra actividad actual o, quizá, ser el día de mañana grandes directores y directoras de Comunicación.
Hemos disfrutado este camino de crecimiento personal y estoy plenamente convencido de que los que os aventuréis a probar la experiencia estaréis dentro de un año escribiendo vuestras propias reflexiones sobre lo que habréis vivido. Todo gracias a un equipo de profesores excepcionales, con una enorme experiencia profesional y al conocimiento y vivencias que compartiréis con vuestros compañeros de viaje.
Me ha encantado el artículo, Iván. La verdad es que todos los profesores lo damos todo para que os abráis camino a nivel profesional. Vivimos en un mundo incierto, en el que el cambio es la constante y, dentro de este marco, apostar por el crecimiento personal y profesional es, sin duda, la mejor de las opciones posibles.
Siguiendo los principios del coaching, sólo puedo decirte que disfrutes del camino… crea, poco a poco, las condiciones de posibilidad para que las cosas, sencillamente, ocurran y no te olvides nunca que eres un ex alumno UB! Éxitos!
Como siempre un orgullo y un ejemplo
Ha sido un honor formar parte de este equipo de profesores. Contad conmigo desde hoy y hasta siempre que lo deseéis en este camino constante de aprendizaje! Adelante!