Con ocho años de historia, 11 temporadas y más de tres millones de espectadores en cada programa, Salvados de La Sexta ha consolidado su propuesta de periodismo cercano y directo gracias a una apuesta que combina contenidos de alto valor con un ritmo audiovisual siempre elegante e impactante.
Laura Gimeno y Màrius Sánchez son los coordinadores de redacción del programa. Durante nuestra última Business Afterworks, nos explicaron por qué son el primer eslabón de un perfecto engranaje en el que la información es el elemento más importante –“sin tema no hay programa”-, la producción es el departamento indispensable –“se puede hacer todo lo que entra en el calendario, lo que no, lo descartamos”– y Jordi Évole es el gancho con el ciudadano de a pie –“hace las preguntas que tú o yo haríamos”-.
La evolución natural del programa, desde una propuesta más cercana al humor hasta su aproximación hacia el espacio de periodismo de investigación que es hoy, ha marcado la conformación de la redacción. Si en sus inicios los profesionales que conformaban el equipo tenían en su mayoría un perfil de guionista y en menor medida eran periodistas, hoy cuentan con dos equipos de cinco redactores cada uno que pueden llegar a trabajar hasta tres o cuatro programas de manera simultánea para conseguir estar cada semana en emisión. Como media, tal y como detallaron Laura y Màrius, se invierten tres semanas de investigación, una de rodaje y dos de postproducción.
Laura Gimeno y Màrius Sánchez, redactores jefes de Salvados
En términos generales, previo a su emisión, un programa de Salvados sigue el siguiente proceso:
- La redacción elabora un documento llamado “Trama” donde se vuelca toda la información en relación al tema y, sobretodo, se contrastan todos los datos disponibles con diversas fuentes. En esta fase, explican los coordinadores de redacción, las reuniones de redacción son espacios sin filtro: todo se puede plantear. Posteriormente se aplicará el posicionamiento ético ajustado a la línea editorial.
- Con el tema plenamente documentado, se elige el mejor enfoque y formato colaborando estrechamente con el departamento de realización “que tiene el mérito de “hacer grande cada historia a través de los escenarios, transiciones, etc”. En este aspecto, Salvados es un programa flexible: el mismo tema marca el formato. Por ello no hay dos programas iguales, porque los temas son distintos y el esfuerzo que se hace en el aspecto estético tiene relación directa con la historia.
- Durante el Afterwork compartieron tres ejemplos de tratamiento de la información: temas de denuncia, debates y entrevista. En el caso de estas últimas, tanto por estética como por estilo periodístico se opta por un perfil único y muy potente residiendo todo el peso del programa en la potencia del cuestionario y en la capacidad del presentador para conectar con el entrevistado.
- El programa entra en postproducción, que según explican los coordinadores de redacción, junto con realización son los responsables de que cada historia se convierta en un gran discurso.
Los redactores de Salvados explican que, programas como el de la entrevista al Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, combinan tensión con distensión de manera controlada en un formato altamente innovador.
Tal y como quedó patente durante el Afterworks, la propuesta de Salvados se basa en grandes dosis de audacia y creatividad periodística. No hay entrevistado inalcanzable, no hay autocensura, ni tema imposible. Por eso engancha, porque aunque parece difícil, en cada programa, Salvados se supera.
