El 14 de octubre es el Día Mundial de los Cuidados Paliativos. Con motivo de este día, y para conmemorar el incansable y necesario trabajo de los profesionales que trabajan en este área, compartimos con vosotros una entrevista con Emma Costas, Enfermera, Directora PADES Mutuam, miembro de la Junta directiva de la Societat Catalana de Cures Pal·liatives y Responsable del Grup de Cures Pal·liatives del Col·legi Oficial d’Infermeres i Infermers de Barcelona.
Con sus palabras, queremos reivindicar la importancia de los enfermeros de Cuidados Paliativos, y la necesidad de que este cuerpo de conocimiento sea transversal en el sistema sanitario para poder dar apoyo tanto a familiares como a pacientes.
Como mensaje dirigido al colectivo enfermero decir que los cuidados paliativos son un área de conocimiento específico dónde el rol enfermero y su esencia del cuidar son el pilar de un modelo de atención paliativa, por lo tanto, un área dónde poder desarrollar el rol enfermero en su máxima expresión
Y para la sociedad en general: Debemos desvincular los cuidados Paliativos de la atención exclusiva al final de la vida y que los Cuidados Paliativos tienen por objetivo mejorar la calidad de vida de los pacientes independientemente de la enfermedad que padezcan, durante todo el proceso de la enfermedad.
La etapa de final de vida es un período de tiempo muy variable, que puede ir de meses a días/ horas antes de la muerte. Esta etapa se caracteriza por ser una etapa altamente cambiante, en la que aparecen nuevas necesidades, con un alto impacto emocional, social y espiritual tanto para el paciente como para su familia y entorno cuidador.
Los cuidados paliativos son el tipo de atención o tratamiento que se ofrece a las personas, independientemente de la edad, que tienen una enfermedad crónica avanzada o se encuentran en situación de final de vida y pueden beneficiarse de la atención por parte de un equipo multidisciplinar experto en cuidados paliativos. El objetivo de la atención es mejorar la calidad de vida de la persona y de su entorno cuidador con la misión de minimizar el sufrimiento físico y emocional asociado al proceso de enfermedad y muerte.
Si! Quizá no al ritmo que los profesionales y los pacientes y familias necesitan, pero algunos de los cambios más significativos serían:
Es una pregunta muy relevante, pues las enfermeras que trabajan en ámbitos específicos de Cuidados Paliativos, deberán tener formación específica para poder dar respuesta a las necesidades de estos pacientes/ familias, cada vez más complejas. Algunas competencias y por citar algunas: Capacidad de trabajo en equipo, competencias digitales, conocimiento en ética, prestación y gestión de los cuidados, habilidades en comunicación terapéutica….
Pues tenemos presencia de enfermeras en el ámbito de los cuidados paliativos, trabajando en la comunidad, tanto en equipos de Específicos de CCPP como pueden ser los PADES, como en los Equipos de Atención Primaria. En entornos hospitalarios de Agudos o de Atención Intermedia (antes Ámbito sociosanitario), Hospitales Pediátricos, Residencias Geriátricas… Y en entornos no asistenciales, desarrollando funciones de Formación/ Docencia, Gestión, Planificación Sanitaria y Recerca
Por su puesto, atendemos como núcleo central de nuestra intervención tanto al paciente como su familia o entorno afectivo/ cuidador, teniendo en cuenta todas sus necesidades
Para poder acompañar en el proceso de toma de decisiones al paciente, es imprescindible conocer qué grado de información diagnóstica y pronóstica tiene y desea tener: tanto sobre lo que quiere saber cómo lo que no quiere saber. Y poder respetar sus tiempos, espacios, necesidades y generar un perjuicio durante el proceso de aceptación a la enfermedad.
El impacto emocional para los profesionales que acompaña diariamente a pacientes y familiares que están sufriendo puede ser muy alto, pero para ello, es imprescindible la formación y el autocuidado. De deben capacitar en como acompañar y sostener estas situaciones sin “caer” en el dolor de los demás.
Otras estrategias como, la supervisión externa por parte de psicólogos expertos, el trabajo en equipo… pueden contribuir a minimizar el impacto emocional
Debe ser un profesional competente, que haya adquirido y esté formado en las competencias específicas, habilidades propias del modelo de atención y con gran capacidad de trabajo en equipo. Por ello la formación intermedia (como es el postgrado) o la formación avanzada son fundamentales para el desarrollo del rol profesional en el entorno de los CP.
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