Primero: porque las tiene en cuenta.
Se considera que el estado de equilibrio en el Ser humano genera y se manifiesta en la Alegría de Vivir.
Además contempla la existencia de sentimientos y de cualidades, como la asertividad, la fuerza de voluntad, la reflexión… a las que relaciona con diferentes actividades orgánicas (la reflexión con el sistema digestivo por ejemplo). Y elabora tratamientos para reforzarlas, como la existencia de emociones (ira, tristeza, miedo, preocupación…) y el hecho de que su presencia excesiva en nuestro sentir, sea en intensidad o en duración, pueden provocar el desequilibrio y por lo tanto enfermedad.

En el Nei Jing el texto clásico más importante de la Medicina Tradicional China, escrito hace más de 2000 años, ya se hacen importantes referencias a las emociones, considerándolas el factor etiológico (causa de enfermedad) más importante de origen interno.
Segundo: porque las trata.
La acupuntura lleva más de 2.000 años tratándolas, y su campo de acción abarca:
a) La emoción en sí misma, disminuyendo la irritabilidad en un paciente estresado por ejemplo.
b) Tratando la enfermedad que genera, por ejemplo dolor de cabeza que el paciente relaciona con estados de tensión, de irritabilidad o de ira contenida.
c) Actuando de forma preventiva. Dado que describe el efecto de la emoción en el cuerpo, podemos protegerlo
Tercero: porque te centra.
La mayoría de nuestros trastornos emocionales son consecuencia de pésimas elecciones, de equivocarnos al elegir.
¿Por qué nos equivocamos? Porque no decidimos desde la quietud, la calma, con un pensamiento lúcido. Lo que en acupuntura china se conoce como Shenming, la claridad del Espíritu. Tampoco decidimos desde la alegría de vivir que es nuestro estado natural de equilibrio.
Pero aún hay más:
Todos aquellos que sienten la necesidad de trascender el mundo material, el ego (habitualmente a causa del sufrimiento), de iniciar el camino para vivir la vida como seres espirituales, como consciencia y de ser conscientes de sí mismos, como Presencia, pueden encontrar en la Acupuntura un inestimable compañero de viaje.
Nada ni nadie va a caminar en la nieve por ti, pero no es lo mismo llevar zapatos que raquetas de nieve.
¿Cómo es posible que la acupuntura me lo haga más fácil? Porque la Medicina Tradicional China contempla al ser humano como como un Ser dotado de cuerpo, mente y Espíritu (Consciencia). Ese Espíritu no es solo el director de orquesta de todas las funciones orgánicas, sino que se expresa y nos dota a cada uno de nosotros de una serie de cualidades, de talentos que nos individualizan y a través de la “Alegría de vivir” se actualizan, se convierten en actos al interaccionar con el mundo externo, manifestando quienes somos (“Hijos del Cielo” como decían en la antigua China).
Como analogía podemos decir que “la Acupuntura no tiene ningún efecto sobre la Luz que emana del Espíritu, pero si puede limpiar el cristal que la rodea”.