Ajuntament de Barcelona | Distrito Eixample

Conocedores de esta realidad, el distrito dispone de siete Espacios y Casales de Personas Mayores que dan servicio a más de 7.000 personas. Un lugar pensado como espacio de relación e intercambio abierto a las iniciativas ciudadanas. Una oportunidad que el distrito pone a disposición de las Personas Mayores para formarse e informarse, participar y ser solidarios con los otros.

Los Casales y Espacios de las Personas Mayores, son equipamientos que han tenido que transformarse para dar respuesta a los nuevos desafíos de las personas mayores y que tienen como objetivo la promoción de envejecimiento activo, impulsando la participación de las personas mayores en la acción que se desarrolla desde el voluntariado y la cooperación. Son equipamientos creados para ofrecer Espacios vitales y abiertos a la ciudad.

Los Espacios y Casales del Eixample funcionan con un modelo basado en la participación activa de las personas mayores, que intervienen desde el inicio en el diseño, la gestión y el desarrollo de casi todas las actividades que se realizan. 

Desde el Distrito del Eixample se vio la necesidad de apoyar a las personas mayores voluntarias de los Espacios, dotándolos de herramientas que facilitasen su participación en las actividades,e incluso mucho más allá, que los convirtieran en motores de motivación para el resto de personas usuarias.

En una primera fase, se trabajó en concienciar a los usuarios en la importancia de autogestionar el Espacio. Se reforzó el circuito de personas voluntarias del equipamiento para garantizar una mayor participación y se diseñaron jornadas de formación en las cuales se ofrecían a los voluntarios herramientas para la gestión.

Después de cinco años con esta dinámica en marcha, se hizo evidente que el modelo de formación presencial implicaba a las personas voluntarias un sobresfuerzo en la tarea que ya realizaban en el Espacio. Desde este punto de vista se hacía necesario buscar un espacio de formación alternativo, un nuevo elemento motivador. La respuesta fue la creación de una Comunidad Virtual capaz de ofrecer nuevas oportunidades para el crecimiento personal y como voluntario de la gente mayor implicada en cada Espacio.

En un trabajo conjunto con el Instituto de Formación Continua de la Universidad de Barcelona IL3-UB, la Dirección de Servicios a las Personas del Distrito del Eixample, analizó cuál sería el formato más adecuado de esta Comunidad para dar apoyo a la tarea diaria de los voluntarios.

Se detectó que muchas de las buenas prácticas que se llevaban a cabo en un Espacio, podían servir de inspiración para los otros equipamientos. Hacía falta impulsar más y mejor el trabajo en interconectado entre los Espacios y Casales con el objetivo de intercambiar experiencias y aprender de las buenas prácticas.

Así mismo, era imprescindible ofrecer a los voluntarios nuevas herramientas para su capacitación que fueran adaptables a su realidad. Se tenía que pensar en una propuesta que los planteara un reto atractivo y unos beneficios directos a su tarea. 

DEFINICIÓN DEL PERFIL COMPETENCIAL DEL VOLUNTARIO

A través de un ejercicio de autoanálisis por parte de los propios voluntarios se identificaron las competencias más útiles para su tarea diaria y, además, cuales de ellas tenían que ser reforzadas a nivel personal.
 
A través de sesiones de trabajo grupal, coordinadas desde el Distrito, con la participación de las dinamizadoras y el apoyo pedagógico del IL3-UB, los voluntarios priorizaron las competencias en cuatro ámbitos principales: competencias técnicas (por ejemplo: comunicación escrita y verbal, organización y planificación...); competencias relacionales (empatía, escucha activa...); aquellas en sintonía con las características propias del Espacio (orientación al usuario, compromismo con los valores y la cultura de la entidad...), y otros útiles para impulsar la formación de los formadores para conseguir transmitir conocimientos (capacidad didáctica, creatividad...).
 
Con esta fotografía de perfil competencial de los voluntarios, hecha por los mismos voluntarios y guiado por una herramienta de autodiagnóstico competencial creada en el marco del proyecto, cada voluntario identificó en qué competencias se sentía capacitado y cuáles necesitaba desarrollar y consolidar. A partir de esta herramienta se diseñaron diferentes acciones de formación competencial.

COMUNIDAD DE VOLUNTARIOS

La Comunidad Virtual nace para ofrecer un espacio permanente de encuentro e intercambio de conocimientos a los voluntarios en sintonía con el empoderamiento, la iniciativa y la autonomía de actuación que se había trabajado de manera presencial.
 
La Comunidad estuvo diseñada por el equipo de Servicios a las Personas del Distrito del Eixample con el IL3-UB con la colaboración y la validación del usuario final. Fue la primera propuesta de este tipo en la red de equipamientos para las personas mayores de la ciudad de Barcerlona, aunque en un principio representó un desafio para sus usuarios –muchos de ellos no familiarizados con las nuevas tecnologías– se convirtió en una propuesta que les permitió acercarse a los lenguajes actuales de comunicación digital.
 
Entre sus objetivos primordiales está el fomentar la colaboración entre los Espacios, facilitar la difusión de las actividades diseñadas para cada una de las comisiones de voluntarios de los Espacios, pedir opiniones en relación al día a día del equipamiento, tramitar solicitudes de mejoras técnicas en la administración o ofrecer un "cajón de sastre" con recursos necesarios para el día a día de los socios y del Espacio.
 
Es una plataforma que actua como punto de encuentro entre los voluntarios de los diferentes Espacios de la red del Eixample y, además, se ha convertido en un repositorio de recursos para el desarrollo de su tarea a la medida de sus necesidades.

BANCO DE RECURSOS: PÍLDORAS FORMATIVAS

Una de las claves para que los recursos a disposición de los voluntarios se utilizaran y aplicaran a su trabajo diario fue su diseño. Después de las experiencias de formación más tradicionales, lo que se buscaba era un formato de formación de consumo sencillo, con un alto impacto de los mensajes, que fuera capaz de despertar el interés a los usuarios para su formación competencial. 
 
Se trabajó en formato de píldoras formativas con propuestas innovadoras alejadas del formato tradicional de formación. Un ejemplo: con técnicas de storytelling, se creó un cómic donde se planteaba la necesidad de una competencia específica. Se buscaba un elemento motivador, un cómic que les conectaba con su infancia en este caso, y que tuviera un componente lúdico capaz de motivar la necesidad de adquirir nuevas competencias. El cómic se acompañaba de contenidos teóricos en relación a la competencia que se estaba trabajando, elaborados por expertos en la materia y después, en encuentros virtuales vía fórum, se trabajaban en grupo las experiencias vividas por cada uno de los voluntarios alrededor de la píldora.

JORNADAS DE FORMACIÓN INNOVADORA EN LA UNIVERSIDAD DE BARCELONA

Para cerrar el ciclo de participación y formación de los voluntarios a la altura del esfuerzo hecho por hechos, se diseñaron dos jornadas de formación en la Universidad de Barcelona con metodologías de gamificación y Lego Serious Play para impulsar el proceso de reflexión alrededor de sus proyectos en los Espacios y, además, las oportunidades que se abrían gracias a las competencias adquiridas y/o consolidadas.
 
Con una conferencia inicial motivadora, que les permitió descubrir la figura del voluntario en otros ámbitos de gestión alejados de los Espacios, pero con desafio sy retos de gestión comunes, arrancaba una jornada inolvidable en la Universidad para los voluntarios: tuvieron la oportunidad de participar en actividades de formación innovadores donde se ponían en común sus vivencias del proceso y el impacto que estaba teniendo en sus Espacios. Además recogían nuevos recursos aplicables a su actividad diaria.
 
La propuesta acababa con una visita guiada a la Universidad donde se puso de manifiesto que, gracias a su implicación y vinculación con el proyecto, ya formaban parte de la comunidad universitaria de la UB y, lo más importante, habían sido una pieza clave para fortalecer los Espacios y Casales de las Personas Mayores del Distrito del Eixample.