“El gestor conscientemente no actúa, habitualmente, de una forma no ética sino que, en todo caso, lo hace en el convencimiento de que es lo mejor para el logro de los objetivos, que considera Buenos. Incluso en ocasiones puede provocar daño a un tercer con decisiones que pueden ir en contra de sus propios principios. Es la ética limitada por el intrincado camino que recorre la psicología de las persones, con decisiones, muchas veces en contra de su propia integridad, sin que elles, de forma muy clara, lleguen a percibirlo.”
Marc Serer, director del Máster en Gestión Integrada de Proyectos (Project Management) acaba de publicar Gestionando éticamente los proyectos, libro dedicado a «todos aquellos que intentan conseguir todo lo que se proponen y vencer sin dejar vencidos y sin faltar a la verdad».
Gracias a la experiencia como director y gestor de proyectos con más de 40 años de trabajo en una compañía de ingeniería, consultoría y arquitectura, se acerca a los problemas abordados en el libro desde una perspectiva realista y conceptual, con planteamientos auténticos y desenlaces reales.
Sabiendo que los límites de una actuación ética son difíciles de pautar de forma objetiva y sin más pretensiones que ofrecer un punto de arranque para reflexiones y análisis posteriores, el autor recoge 38 casos y noticias reales, a través de los cuales intenta dar pistas para llegar a un modelo de gestión que tenga en cuenta a todos los actores del proyecto, a pesar de la diferencia entre los intereses que se cruzan entre ellos y que pueden entorpecer una conducta ética. Además, pretende mostrar de que manera la relación del gestor con el entorno que le rodea puede afectar a su sistema de valores, que, en definitiva, es la base para su actuación ética.
En estos cinco puntos Marc Serer recoge las consideraciones más importantes, resumiendo lo que con este libro le gustaría transmitir a los lectores:
- La realidad muchas veces se aleja de algunas teorías tanto en el planteamiento como en la resolución de los conflictos.
- No es evidente la determinación de los límites del comportamiento ético.
- Esta falta de evidencia, sumada a la inseguridad en uno mismo, en muchas ocasiones desencadenan en una actuación poco ética que, a la larga, lleva a la aceptación de las conductas que dañan la moralidad de la sociedad.
- Lo anterior justifica el hecho de intentar crear una buena base de partida para objetivar las actuaciones dentro de un marco ético.
- El comportamiento ético es beneficioso para todos.
Esperamos que os animéis a echar un vistazo al libro. Lo podéis leer el la biblioteca virtual de la UPC.
