La atención primaria es una rama asistencial donde la enfermera tiene un papel primordial. En este ámbito, la enfermera se centra, dentro del contexto familiar y comunitario, en el cuidado de la persona en las diferentes etapas de su ciclo vital, desde la infancia, pasando por la juventud y el adulto joven hasta llegar al adulto mayor. Además, la enfermera de atención primaria desempeña un rol fundamental en la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad de la población, por lo que la formación específica en esta área es esencial para cumplir este rol con garantías.
Las funciones, roles y responsabilidades de la enfermera comunitaria son muy variados. Sus principales tareas consisten en:
La promoción de la salud y prevención de la enfermedad
Una de las funciones más importantes de la enfermera comunitaria es la promoción de la salud y prevención de la enfermedad. Esto implica:
● Educar a la comunidad sobre hábitos saludables.
● Aportar información sobre la prevención de enfermedades.
● Fomentar la adopción de comportamientos saludables.
Las enfermeras comunitarias trabajan en colaboración con otros activos de salud para realizar programas de vacunación, detección de enfermedades y campañas de concienciación.
La evaluación de necesidades de salud
Las enfermeras comunitarias realizan evaluaciones de necesidades de salud en la comunidad para identificar los problemas de salud más acuciantes. Utilizan datos epidemiológicos y recopilan información a través de encuestas y entrevistas para comprender las preocupaciones de la comunidad. Esta información se utiliza para desarrollar planes de atención de la salud adaptados a las necesidades específicas de la población que atienden.
La atención directa a la persona y sus familias
Aunque gran parte del trabajo de la enfermera comunitaria se centra en la promoción de la salud y la prevención de enfermedades, el abanico de sus responsabilidades abarca otras situaciones de salud y tiene en cuenta las características y necesidades de cada edad para adecuar los cuidados en cada situación de vida de una población. Esto puede incluir:
- Atención a la infancia y la adolescencia
- Atención específica de la gente mayor
- Atención y seguimiento de personas con enfermedades crónicas o discapacitadas.
- Cuidado y seguimiento de las personas con heridas agudas y crónicas.
- Atención a las personas con problemas graves de salud.
- Seguimiento de la terapéutica farmacológica.
- Atención a las mujeres que sufren violencia.
- Elementos básicos que configuran la alimentación adecuada.
- Atención integral a la persona en situación de enfermedad avanzada y a su familia.
Esta atención y cuidado que realiza la enfermera puede desarrollarse tanto en el ámbito de la consulta en el centro de atención primaria como en el domicilio de las personas o en el contexto comunitario.
Las enfermeras comunitarias trabajan en estrecha colaboración con los demás miembros del equipo de atención primaria como los médicos, la trabajadora social y otros profesionales de la salud para garantizar una atención integral y continua.
Los cuidados que realizan las enfermeras de atención primaria siguen los estándares de la evidencia científica disponible y, además, incorporan la investigación científica dentro del ejercicio sus funciones.
El apoyo emocional y la educación para la salud
Un aspecto fundamental de las enfermeras comunitarias es su trabajo en el apoyo emocional y la educación para la salud de los pacientes y sus familias. Proporcionan información y educación sobre el manejo de enfermedades, ofrecen consejos en temas de salud mental y ayudan a las personas a enfrentarse a las dificultades emocionales relacionadas con su salud.
La coordinación de servicios de atención sanitaria
La enfermera comunitaria, mediante la figura de la gestora de casos, trabaja como enlace entre pacientes y proveedores de servicios de atención sanitaria. Coordinan la atención y garantizan que los pacientes reciban los servicios necesarios de forma oportuna. Esto puede incluir la derivación a especialistas, la organización de servicios de atención domiciliaria y la colaboración con organizaciones de salud locales, entre otras tareas.
¿Cómo puedes formarte para adquirir las competencias en enfermería de atención primaria y comunitaria?
Para trabajar como enfermera en el ámbito de la atención primaria y comunitaria, es fundamental contar con la formación adecuada. En primer lugar, es necesario estar en posesión del título de Grado en Enfermería. Además, para ejercer concretamente como enfermera de atención primaria y comunitaria, es recomendable formarse de forma más específica.
El Máster en Cuidados Enfermeros en la Atención Primaria (CADI) del Instituto de Formación Continua de la Universidad de Barcelona (IL3-UB) ofrece una formación integral en todas las áreas de trabajo donde la enfermera tiene un papel relevante en el ámbito de la Atención Primaria.
Tu actualización constante de conocimientos y habilidades en este campo te permitirá ofrecer la mejor atención a los pacientes, así como mejorar tus perspectivas de inserción laboral en un sitio con una alta demanda de profesionales cualificados. Es una formación completa para poder desempeñar con garantías las funciones de enfermera de atención primaria y comunitaria.
